Albisteak

Denuncian y piden la derogación de la legislación de excepción en la manifestación celebrada en Bilbao

MANIFESTACIÓN BILBAO – LECTURA COMPARSAS

Una vez más, a causa de la Covid-19, las bilbaínas y los bilbaínos no podemos celebrar la Aste Nagusia como quisiéramos. Esta pandemia ha ensombrecido la alegría y la felicidad que nos trae Mari Jaia, pero no las ha apagado. Lo hemos visto estos días, y este acto de hoy también es un ejemplo de ello.

Las personas que conformamos las comparsas hemos trabajando para llenar de iniciativa y de color, para que las bilbaínas y los bilbaínos y toda la gente disfrutara de estas fechas especiales de alguna manera. Y, hoy, como en años anteriores, hemos querido recordar los derechos de las personas que no pueden estar hoy aquí.

Porque la situación de las personas presas, refugiadas y deportadas vascas sigue siendo inusual, al igual que la Aste Nagusia de este año. Las y los miembros de las comparsas hemos querido denunciar esta situación porque creemos que es el momento de ponerle fin. Para ello es imprescindible la activación de la ciudadanía; el compromiso y la solidaridad de cada persona es un impulso hacia el cambio de esta situación.

Las personas que conformamos las comparsas hemos querido salir hoy a la calle para reivindicar el fin de la política de excepción que aún sigue afectando a los presos y a las presas vascas. Esta legislación de excepción es la que mantiene aún la vulneración de derechos básicos de las personas presas y supone un bloqueo para el proceso de regreso a casa que todos los presos y todas las presas deben llevar a cabo. Es por ello que animamos a la ciudadanía a seguir dando pasos para acabar con esta situación, ya que, somos nosotros y nosotras, la ciudadanía, el impulso para el cambio.

Muchas gracias a todas y todos por estar hoy aquí con nosotras y con nosotros. ¡Sigamos haciendo camino!

MANIFESTACIÓN BILBAO – LECTURA SARE

En primer lugar, muchas gracias a todas y a todos por estar hoy aquí con nosotras y con nosotros. Por otro lado, muchas gracias por el compromiso que habéis demostrado todos estos años, por vuestra solidaridad y vuestra activación. Sin vosotras y vosotros no hubiéramos llegado hasta aquí.
Con cada pequeña iniciativa y acción, gracias a cada persona que ha salido a la calle, gracias a las dinámicas generadas en los barrios y pueblos en los que nos hemos organizado, estamos demostrando que somos el motor del cambio, el motor para avanzar en la convivencia y lograr la paz.

El año 2021 está siendo un año diferente. La situación generada por la pandemia mundial surgida hace un año nos ha generado grandes cambios en nuestras vidas, sí, pero tenemos que decir que los cambios que se han dado en cuanto a los presos y a las presas vascas también han supuesto un rayo de luz a lo largo de este difícil año

Después de largas décadas, se han dado pasos significativos para poner fin a la política de alejamiento, lo que está siendo fundamental sobre todo para aligerar la carga de los familiares y amigos. Además, es un primer paso importante para poder avanzar en el camino de vuelta a casa que deben recorrer las presas y los presos vascos. Pero no es suficiente. Por un lado, porque la mayoría de las presas y de los presos sigue en cárceles situadas fuera de Euskal Herria, y, por otro lado, porque la aplicación normalizada de la progresión de grado a todas las presas y a todos los presos es un instrumento imprescindible para desarrollar ese proceso. Pero, si no se pone fin a la legislación de excepción, no se va a dar esa normalización, es decir, la aplicación de la legislación ordinaria.

Por ello, debemos seguir movilizándonos para seguir avanzando en ese camino abierto por esta nueva situación, para que desaparezca la legislación de excepción y se aplique la progresión de grado. Hoy nos hemos juntado en Bilbao, recogiendo el testigo de las movilizaciones que se han llevado a cabo a lo largo del verano en Iruña, Gasteiz y Donostia. Hemos organizado muchas movilizaciones bajo el lema Ibilian-Ibilian etxerako bidea, y seguiremos haciéndolo durante los dos próximos meses. Por un lado, con las marchas que vamos a llevar a cabo en cada herrialde,  y por otro, con la manifestación general que vamos a llevar a cabo en Donostia, el 23 de octubre.

Seguiremos en marcha, caminando hacia el regreso a casa de todos y todas, caminando hacia la convivencia y la paz.
Sigamos haciendo camino, el camino a casa.
Eskerrik asko.


El próximo viernes día 27 SARE se movilizara por las calles de Bilbao dentro de la campaña «Ibilian-ibilian etxerako bidean»

Una vez más, a causa de la Covid-19, las bilbaínas y los bilbaínos no podemos celebrar la Aste Nagusia como quisiéramos. Esta pandemia ha ensombrecido la alegría y la felicidad que nos trae Mari Jaia, pero no las ha apagado.

Este año también, a pesar de la situación que estamos viviendo, las personas que conformamos las comparsas seguimos trabajando para que las bilbaínas y los bilbaínos y toda la ciudadanía de Euskal Herria podamos disfrutar de estas fechas especiales de alguna manera. También las personas que están lejos.

Al igual que en años anteriores, nos sumaremos a la movilización de la red ciudadana Sare porque entendemos que la fiesta y la reivindicación están estrechamente relacionadas, y porque pensamos que también en Bilbao es el momento de llenar las sillas que están vacías.

El año 2021 está siendo un año especial. La situación generada por la pandemia mundial surgida hace un año nos ha generado grandes cambios en nuestras vidas, sí, pero tenemos que decir que los cambios que se han dado en cuanto a los presos y a las presas vascas también han traído un rayo de luz a lo largo de este difícil año.

Después de largas décadas, se han dado pasos significativos para poner fin a la política de alejamiento, lo que está siendo fundamental sobre todo para aligerar la carga de sus familiares y amistades. Además, es un primer paso importante para poder avanzar en el camino de vuelta a casa que deben recorrer las presas y los presos vascos. Pero no es suficiente. Por un lado, porque la mayoría de las presas y de los presos sigue en cárceles situadas fuera de Euskal Herria, y, por otro, porque la aplicación normalizada de la progresión de grado a todas las presas y a todos los presos es un instrumento imprescindible para desarrollar ese proceso. Ya que, si no se pone fin a la legislación de excepción, no se va a dar esa normalización, es decir, la aplicación de la legislación ordinaria.

Por ello, debemos seguir movilizándonos para seguir avanzando en ese camino abierto por esta nueva situación, para que desaparezca la legislación de excepción y se aplique la progresión de grado.

Os convocamos a toda la ciudadanía de Bilbo y de Bizkaia a participar en la manifestación que se llevará a cabo el 27 de agosto, a las 19:30, partiendo de la plaza elíptica. Sigamos andando, haciendo el camino a casa.


Con la manifestación celebrada en Donostia finaliza la dinámica de Gipuzkoa «Ibilian-ibilian etxerako bidean»

Muchas veces, el camino es largo; otras veces, escabroso; otras, lleno de cruces de camino. Pero el camino es siembre un medio para llegar a algún sitio. Camino hecho cada cual por su cuenta, o en grupo. Porque el camino se hace al andar. Paso a paso, a fuerza de andar.

Caminante no hay camino, se hace camino al andar. Así lo dijo Antonio Machado. Y así lo demuestran los últimos años. Hoy, nos toca dar las gracias. Daros las gracias a todos y todas por vuestro compromiso, por vuestra solidaridad y por vuestra activación. Sin ella, jamás hubiéramos llegado a donde estamos. A este momento, tan esperado, sobre todo por quienes más lo han padecido, los familiares y amigos de los y las presas vascas alejadas a miles de kilómetros durante más de 30 años. Hoy, estamos ante el comienzo del fin. Del fin de la política de alejamiento. Hemos dejado atrás las cárceles más alejadas. Ahora toca dar comienzo a una nueva etapa. Toca seguir caminando para seguir haciendo camino; el camino de regreso a casa de todos y todas ellas.

Gracias. Muchas gracias por vuestro compromiso, por vuestra solidaridad y por vuestra activación. Sin ella, jamás hubiéramos llegado a donde estamos. Gracias a cada pequeña iniciativa o actividad, gracias a cada persona que ha salido a la calle, gracias a las dinámicas creadas en cada barrio o pueblo en el que nos hemos organizado, estamos demostrando que somos el motor del cambio, motor que tiene por meta avanzar en la convivencia y conseguir la paz.

Estamos iniciando una nueva etapa: la de dejar atrás la política de alejamiento y recorrer el camino de vuelta a casa de las personas presas y refugiadas. Y ese es nuestro objetivo también hoy. Con dos importantes reivindicaciones: que todas las presas y todos los presos estén en Euskal Herria y que se aplique la progresión de grados. Ese es el camino a recorrer durante los próximos meses. Ese es el camino a recorrer para traer a casa a presas y a presos vascos. Porque, según la ley, en la medida en que son vascas y vascos, les corresponde cumplir la condena en las cárceles de aquí. Y, aplicándoles la legislación que se aplica al resto de presas y presos, les corresponde tener permisos y conseguir la libertad condicional una vez cumplidas las 3/4 partes de su condena. No estamos pidiendo ningún privilegio, ni ningún favor. Estamos pidiendo que se respeten sus derechos y que se cumpla la ley, como corresponde a cualquier persona presa.

En definitiva, estamos diciendo que estamos llegando al fin de la política penitenciaria de excepción que ha estado vigente durante años. Con la fuerza y el empuje de todas vosotras y de todos vosotros, como hasta ahora.

Y para ello, también tenemos que fijarnos en las reivindicaciones que hemos realizado hoy durante la manifestación. Porque la legislación de excepción tiene muchos flecos, y todavía, a pesar de que se han dado los pasos mencionados, hay nudos que hay que desatar en el seno de la política penitenciaria:


Por un lado, nos corresponde soltar el nudo de los presos gravemente enfermos. Todos estos años han demostrado que la cárcel y la enfermedad no son compatibles, sino el camino a una condena a muerte. La ley también nos indica que es así, ya que contempla la posibilidad de que el preso enfermo cumpla la pena en su domicilio, con el apoyo de sus familiares y con el seguimiento del médico de confianza. Son 19 los presos vascos que aún permanecen en prisión sufriendo una grave enfermedad. Los casos de unos pocos presos, aquellos a los que se les ha trasladado a un centro especializado o a sus casa, demuestran que es posible otro camino, en el que poder hacerfrente a la enfermedad. Para no tener que sufrir otra muerte más, los presos enfermos de deben estar en casa.


Por otro lado, tenemos que liberar el nudo de las mujeres presas. Porque las mujeres presas tanto en España, como en Francia todavía están sufriendo una situación de alejamiento y aislamiento. Hemos dicho a menudo que las presas han sido castigadas doblemente; con la sentencia y por el hecho de ser mujeres. Además de las medidas de excepción aplicadas al conjunto de los y las presas vascas, estas presas deben pasar su condena en prisiones que no están preparadas para las mujeres, y muchas veces les ha tocado estar sin ninguna otra compañera, como consecuencia del alejamiento, añadiendo el sentimiento de aislamiento que esto conlleva a una situación ya bastante dura. En total son 29 las mujeres presas en ambos estados. Hoy también estamos pidiendo que se acabe con esa doble pena, para que todas las presas sean trasladadas prioritariamente a Euskal Herria, para acabar de una vez por todas con la situación de aislamiento y alejamiento.


Como suele ocurrir con las mujeres, algo similar ocurre también con los y las presas que han decidido tener familia, ya que la prisión no está pensada para garantizar este derecho dignamente, y menos cuando se establece una legislación de excepción. Los y las niñas, adolescentes y jóvenes de la mochila que tienen en prisión a su padre, a su madre o a ambos, se han visto obligadas a hacer kilómetros durante todos estos años para poder recibir el abrazo de sus padres. Todavía hay demasiados kilómetros entre unos y otros. La situación de Covid no ha ayudado a suavizarlo, al contrario, ya que ha supuesto también la interrupción del contacto, hasta durante año y medio en caso de algunos/as niñxs. El derecho de estos/as niñxs a estar con sus padres/madres y de las personas presas a ser padres/madres y a tener una vida familiar es lo que esta política penitenciaria de excepción dificulta de sobremanera. Una vez más, pedimos el inmediato traslado de todos/as ellos/as a Euskal Herria y la creación de módulos familiares en las cárceles de Euskal Herria. Si se quiere hacer una política diferente, tenemos que traer los derechos de los y las niñas y el derecho a la familia al centro.

Como decíamos, la política de excepción tiene muchos flecos. Como es el caso de los y las presas de edad avanzada, que a pesar de tener gran parte de la condena cumplida y edades superiores a los 65 años, siguen cumpliendo condena en prisiones fuera de Euskal Herria, sin permisos y sin tercer grado penitenciario, sin poder avanzar en ese proceso de regreso a casa.

Estas son las denuncias que hemos querido plasmar durante el recorrido realizado, pero hoy, queremos hacer mención también a otra reivindicación que desde hace ya un tiempo llevamos realizando; la petición de derogación de la ley 7/2003 que afecta a alrededor de 60 presos y presas vascas y que, en definitiva, es una ley para encubrir la cadena perpetua, alargando más allá de lo establecido en la legislación ordinaria las penas de cárcel.

Terminemos con esta situación. Sigamos dando pasos. Sigamos caminando. Sigamos haciendo el camino. El camino de regreso a casa. El camino hacia la convivencia y la paz.

No nos paremos ahora, sigamos en movimiento. Por eso, hoy, os queremos pedir que sigáis recorriendo el camino con nosotras en las movilizaciones que las próximas semanas y meses se realizarán en diferentes zonas de Euskal Herria y sobre todo, en la movilización general que estamos organizando para el próximo 23 de octubre, aquí en Donostia.


Una Manifestación pide en Gasteiz que todas las presas y todos los presos estén en Euskal Herria y que se aplique la progresión de grados

Muchas veces, el camino es largo; otras veces, escabroso; otras, lleno de cruces de camino. Pero el camino es siembre un medio para llegar a algún sitio. Camino hecho cada cual por su cuenta, o en grupo. Porque el camino se hace al andar. Paso a paso, a fuerza de andar.

Caminante no hay camino, se hace camino al andar. Así lo dijo Antonio Machado. Y así lo demuestran los últimos años. Hoy, nos toca dar las gracias. Daros las gracias a todos y todas por vuestro compromiso, por vuestra solidaridad y por vuestra activación. Sin ella, jamás hubiéramos llegado a donde estamos. A este momento, tan esperado, sobre todo por quienes más lo han padecido, los familiares y amigos de los y las presas vascas alejadas a miles de kilómetros durante más de 30 años. Hoy, estamos ante el comienzo del fin. Del fin de la política de alejamiento. Hemos dejado atrás las cárceles más alejadas. Ahora toca dar comienzo a una nueva etapa. Toca seguir caminando para seguir haciendo camino; el camino de regreso a casa de todos y todas ellas.

Gracias. Muchas gracias por vuestro compromiso, por vuestra solidaridad y por vuestra activación. Sin ella, jamás hubiéramos llegado a donde estamos. Gracias a cada pequeña iniciativa o actividad, gracias a cada persona que ha salido a la calle, gracias a las dinámicas creadas en cada barrio o pueblo en el que nos hemos organizado, estamos demostrando que somos el motor del cambio, motor que tiene por meta avanzar en la convivencia y conseguir la paz.

Estamos iniciando una nueva etapa: la de dejar atrás la política de alejamiento y recorrer el camino de vuelta a casa de las personas presas y refugiadas. Y ese es nuestro objetivo también hoy. Con dos importantes reivindicaciones: que todas las presas y todos los presos estén en Euskal Herria y que se aplique la progresión de grados. Ese es el camino a recorrer durante los próximos meses. Ese es el camino a recorrer para traer a casa a presas y a presos vascos. Porque, según la ley, en la medida en que son vascas y vascos, les corresponde cumplir la condena en las cárceles de aquí. Y, aplicándoles la legislación que se aplica al resto de presas y presos, les corresponde tener permisos y conseguir la libertad condicional una vez cumplidas las 3/4 partes de su condena. No estamos pidiendo ningún privilegio, ni ningún favor. Estamos pidiendo que se respeten sus derechos y que se cumpla la ley, como corresponde a cualquier persona presa.

En definitiva, estamos diciendo que estamos llegando al fin de la política penitenciaria de excepción que ha estado vigente durante años. Con la fuerza y el empuje de todas vosotras y de todos vosotros, como hasta ahora.

De lo que hablamos es de acabar con esta política de excepción y vulneradora que durante años han perpetuado, endureciendo eternas estancias en prisión y años de sufriendo para familiares y amigos. Y no nos olvidamos hoy de los y las presas que aún siguen en prisión con enfermedades graves, muchas de ellas sin posibilidad de sanar, a quienes solo se les permite el regreso a casa para morir. Ni uno más. Ni una más. Todos y todas las presas vascas con enfermedades graves deben ser excarceladas de inmediato. Cada día que pasa es un día menos en la lucha contra sus enfermedades.

Acabemos con esto. Sigamos dando pasos. Sigamos caminando. Sigamos haciendo camino. El camino de regreso a casa. El camino hacia la convivencia y la paz.

No nos paremos, sigamos en movimiento. Por ello, hoy, os queremos pedir que sigáis haciendo camino con nosotras y con nosotros, en la iniciativa que hemos organizado para el próximo octubre. Os queremos invitar a participar a la marcha que bajo el lema «Ibilian-Ibilian, etxerako bidean» recorrerá Araba el 7, 8 y 9 de octubre, de día y de noche, sin parar.

Así es, os volvemos a pedir que no paréis que sigáis caminando con nosotras y que os suméis, el 7, 8 y 9 de octubre, a la marcha que de manera ininterrumpida recorrerá Araba bajo el lema “Ibilian-Ibilian, etxerako bidean”.

Entre todas lo conseguiremos. Lortuko dugu. Eskerrik asko!


Del 7 al 9 de octubre se realizara la Vuelta a Araba «Ibilian-ibilian etxerako bidean»

Ibilian ibilian recorriendo el camino a casa es el eslogan con el que se le ha dado forma a la campaña de verano de Sare, haciendo numerosas manifestaciones como la que vamos a realizar mañana en Gasteiz a las 18:30 desde la Plaza Bilbao. Ibilian-ibilian, paso a paso, escenificaremos tres pisadas repletas de solidaridad por las calles de Gasteiz.

Se han quedado atrás los centros penitenciarios más alejados, el aislamiento y los primeros grados, y gracias a ello hemos podido dar fin a una antigua fase de excepcionalidad. Pero con estos pasos se ha abierto una una fase, y en ella nos toca todavia recorrer un largo camino.
Las personas presas todavia tienen que hacer frente a diversos obstáculos para recorrer los caminos legales. Muchas medidas de excepción están todavía vigentes, y nosotras, junto con el apoyo de la gran mayoría ciudadanía queremos que pasen a ser parte del pasado. Es hora de dejar la política penitenciaria de excepción atrás y de empezar a aplicar la ley.

Tenemos que seguir dando pasos ya que solamente el 33% de las y los presos están en centros penitenciarios de Euskal Herria, cuando todas deberían estar aquí. La gran mayoría continúa en segundo grado, cuando aplicando la legalidad vigente debería estar beneficiándose de permisos, terceros grados e incluso de la libertad condicional.

Por todo ello llamamos a las y los alaveses a participar en la manifestación que hemos convocado mañana en Gasteiz. Tenemos que acelerar el camino a casa de las y los presos y para ello tenemos que llenar las calles.

Hoy queremos dar a conocer otra iniciativa que llevaremos a cabo en octubre. Del 7 al 9 de dicho mes realizaremos una marcha que atravesará Araba de lado a lado, la Arabako Itzulia. La marcha dará comienzo en Agurain y desde allí y durante tres días pasaremos por diferentes pueblos de Araba lanzando nuestras reivindicaciones a los cuatro vientos y pidiendo la excarcelación de las y los presos vascos. Campezo, Bernedo, Treviño, el centro penitenciario de Zaballa, Izarra, Amurrio y Murguía serán entre muchos otros algunos de los pueblos que atravesará la marcha. En total serán 185 kilometros repletos de solidaridad que finalizarán en Gasteiz el día 9 de Octubre. Paso a paso, ha llegado el momento de traer a las y los presos vascos a casa.

Estamos contentas porque ha sido un año positivo en lo que a pasos penitenciarios se refiere, pero todavía queda un largo camino hasta traer a las personas presas a casa y seguiremos trabajando para ello.


La Red ciudadana SARE valora positivamente el traslado producido ayer de presos vascos a cárceles de Euskal Herria.

Consideramos que resulta necesario continuar este proceso, aunque sea lentamente, sin esperar a que en Octubre el Gobierno Vasco reciba la transferencia de prisiones y los presos y presas, comiencen a solicitar su ubicación en Euskal Herria. Hay que continuar.

Con este objetivo Sare continuará manteniendo abierto el cauce de comunicación con aquellas instancias políticas que tienen en sus manos poner fin a décadas de vulneración de derechos de los presos y presas vascos y sus familias.

Así mismo, Sare, valora positivamente que algunas Junta de tratamiento continúen aplicando la legislación penitenciaria a través de la aprobación de permisos y otras medidas a las que estos presos y presas tienen derecho.

En esta línea, volvemos a denunciar el continuo bloqueo que la fiscalía y algunos jueces, aplican para evitar que lo aprobado por las Juntas de tratamiento de las cárceles, se les pueda ser aplicado.

Esto hace más urgente que nunca , que junto a la transferencia de prisiones , se produzca el cambio de los Jueces Centrales de Vigilancia Penitenciaria, actualmente competencia de la Audiencia Nacional, por los jueces del lugar de proximidad, como lo eran con anterioridad.

Pedimos a las Instituciones Vascas, tengan en cuenta esta demanda que ayudaría a la aplicación de una política penitenciaria de carácter ordinaria, sustituyendo de esta forma la legislación excepcional que tanto sufrimiento está causando.


El 21 de agosto convocamos una movilización de herrialde en Donostia

Hace ya varias semanas que la dinámica IBILIAN-IBILIAN Etxerako bidean gira por las comarcas de Gipuzkoa; de Debaldea a Buruntza, de Buruntza a Goierri, de Goierri a Tolosaldea, de Tolosaldea a Urola, después a Oarsoaldea y así llegar el 21 de agosto a Donostia.

Queremos extender a todos los rincones de Gipuzkoa la idea de que la verdadera convivencia y la paz pasan por acelerar el proceso de vuelta a casa de l@s pres@s y llevarl@s hasta su destino. En los últimos meses se han abordado importantes pasos en este camino. Esto ha supuesto, entre otras cosas, el cierre de una antigua fase y la apertura de una nueva.

Hemos dejado atrás el aislamiento, los primeros grados y las cárceles más alejadas, pero en esta nueva situación siguen existiendo muchos obstáculos. A pesar de estar en segundo grado, las puertas a recibir permisos o a obtener libertades condicionales no están abiertas del todo. Además, como otras medidas de excepción, en lo que se refiere a l@s pres@s vasc@s, todavía no se les permite abordar la trayectoria que establece la ley.

Eso es lo que la mayoría de la sociedad vasca viene reclamando en los últimos años, que se abra a l@s pres@s vasc@s el camino que dice la propia ley, sin medidas añadidas. Y eso es lo que vamos a reivindicar el próximo 21 de agosto en las calles de Donostia. Aunque hemos conseguido acercar a l@s pres@s vasc@s, está claro que tenemos que traerl@s a Euskal-Herria, que los gravemente enfermos tienen que estar en casa, que a las mujeres sufren una doble condena, que los 85 niños de la mochila todavía no pueden recibir los abrazos de sus padres y madres con normalidad. Una vez más, reivindicaremos la necesidad de poner fin a todas las medidas de excepción.

Por todo ello, os animamos a participar en la manifestación que celebraremos en un ambiente festivo y que saldrá desde aquí mismo, El Buen Pastor, el 21 de agosto a las 17:30 de la tarde. Están tod@s invitad@s.


La última etapa de la Vuelta Ciclista de este año ha comenzado en Zumaia y ha finalizado en Donostia

Un año más, cientos de kms., cientos de personas, habéis recorrido una gran parte de Hegoalde.

Con cada pedalada que habéis dado; con cada paso que recorremos en la calle o en el monte, estamos reivindicando abrir el camino de regreso a casa, que tienen derecho a recorrer los presos y presas vascos.

Estamos demostrando en todas estas dinámicas, que muchas pequeñas acciones, realizadas por muchas personas y en muchos sitios, pueden hacer cambiar las cosas. Y eso es lo que somos: Un motor de cambio, para avanzar hacia la convivencia y una verdadera paz en EH:

Vamos avanzando; vamos derribando bloqueos; vamos terminando con el alejamiento, pero no debemos caer en la complacencia. Nos queda un largo camino que recorrer, hasta que todos y todas estén aquí.

Es por ello, que desde SARE, no queremos dar por normalizada una situación que no lo es.

Si, con el esfuerzo de todas y todos, hemos ido consiguiendo que las cárceles mas alejadas de EH, deben de albergar a presos y presas vascos. Hemos puesto fin, a una etapa terrible, donde la vulneración de los derechos de los presos y sus familias, ha sido el objetivo más represivo que hemos sufrido.

Pero ahora tenemos por delante, otras etapas que realizar. Quienes hoy están en Dueñas, en Mansilla, Aragón, o Madrid, tenemos que traerlos aquí. Y este trabajo lo tenemos que desarrollar entre todas y todos: Instituciones, partidos, sindicatos y sociedad civil. Nadie puede quedarse al margen de este objetivo, porque estamos hablando de derechos. De Derechos humanos.

Y junto al alejamiento, tenemos por delante poner fin a la política penitenciaria de excepción. Terminar con el bloqueo de la progresión de grados; con la actitud de una justicia que bloquea permisos y progresiones de grado.; poner fin a las leyes que posibilitan cadenas perpetuas encubiertas, de hasta 40 años de prisión efectiva; o aquellas otras, que impiden computar el tiempo cumplido en cárceles francesas.

En definitiva, Poner fin a las actitudes de revancha. Solo así, podrán realizar el camino de regreso a casa.

Sigamos pedaleando; continuamos andando, recorramos juntos este camino, para poder traer a casa a todos y todas.

SARE, continuara siendo parte de la solución. Continuaremos trabajando en la consecución de todos estos objetivos.


LA RED CIUDADANA SARE presenta una marcha a pie (350km), que recorrera ininterrumpidamente toda la geografia NAVARRA del 29 de septiembre al 2 de octubre.

Nos hemos movilizado en un lugar significativo en la historia de nuestro pueblo.

El rey español Felipe II mandó construir la Ciudadela de Pamplona en el siglo XVI. Tenía una planta con forma de estrella de cinco puntas. Cada punta posibilitaba el control de los ataques que podían venir de cualquier dirección. El objetivo de la construcción militar era castigar a la ciudad, controlar a la población y mitigar su apoyo hacia Juan de Albret.

La política de dispersión puesta en marcha en mil novecientos ochenta y ocho tenía como objetivo castigar a los presos y a las presas, establecer un control sobre ellas y ellos y mitigar su apego hacia Euskal Herria. Han muerto treinta y cinco presos en la cárcel; el último, Igor González. Y, encerrándolos en fortalezas lejanas, impusieron un castigo añadido también a sus familiares: miles de kilómetros en las carreteras, cansancio físico y mental, gran coste económico y muerte. Hasta la fecha, Natividad Junco es el último nombre de una larga lista de dieciséis personas.

Utilizaron la ley para negar derechos; se valieron de la interpretación más cruel de la ley para poner en marcha y aplicar una política penitenciaria inhumana.

Poco a poco, la situación en las cárceles está cambiando. Hemos necesitado para ello más de tres décadas. Esta nueva situación es el fruto del esfuerzo de muchas personas: ciudadanas y ciudadanos, partidos políticos, sindicatos, innumerables agentes sociales e instituciones de Euskal Herria, así como, evidentemente, el Colectivo de Presas y Presos Políticos Vascos y muchas víctimas.

Aun así, es evidente que todavía no hemos conseguido dar una solución integral a la situación de presas y presos. Queremos dejar atrás los tiempos en los que la ley se utilizaba como instrumento de vulneración de derechos. Dejar atrás, porque queremos avanzar, pero avanzar ¿hasta dónde? Hasta que las presas y los presos estén en casa.

Tenemos que recorrer entre todas y todos, el proceso de vuelta a casa de presas y presos. Somos conscientes de la dificultad de nuestro empeño, pero tenemos la determinación para dar un paso más. El definitivo: comenzar a traerlos a casa. Ahora es el momento de ETXERAKO BIDEAN.

En Nafarroa queremos abordar con fuerza esta segunda fase y queremos hacerlo con una iniciativa significativa. Una marcha que recorrerá a pie (350km), día y noche, sin descanso, pasando por pueblos y barrios donde hay presos y presas vascas. Comenzará el 29 de septiembre en Lesaka y finalizará el 2 de octubre en Pamplona. El reto lo queremos llevar pueblo a pueblo, barrio a barrio y, por tanto, le queremos dar eco desde hoy. Así pues, invitamos a partidos, sindicatos, agentes y ciudadanía en general a participar y aportar en dicha iniciativa. ¡Recorramos juntos el camino a casa de presos, exiliados y deportados!


NOTA: Estamos ante una nueva fase; se vacían, por fin, las cárceles de Andalucía de presxs vascxs

Hoy se han anunciado los últimos traslados desde las prisiones de Andalucía, quedando esta, por fin, vacía de presos vascos. Dejamos atrás, así, las prisiones más alejadas, para comenzar ese acercamiento de todos y todas.

A partir de estos momentos comienza una nueva fase. Una fase muy importante de cara a la convivencia en nuestro país; es el momento de desarrollar el camino de regreso a casa de todos y todas las presas vascas.

Sin duda, esta noticia y los traslados que se han venido dando hasta el momento, son un gran alivio para muchas familias. Pero aquí no se acaba nada, aquí se inicia un proceso del fin total de la política de alejamiento y un proceso de regreso a casa que fundamentalmente se hará a través de la progresión de grados.

Esta será, a partir de estos momentos, el objetivo de la Red Ciudadana Sare y creemos, también, de gran parte de la ciudadanía. Un objetivo que esperamos cumplir cuanto antes.