Miles y Miles de personas nos juntaremos en Bilbao y Baiona, para decirles a Madrid y París, que no se han cumplido, todavía, las condiciones para una paz justa y duradera. Les diremos que el proceso no se ha resuelto con el fin del conflicto armado. Les diremos alto y claro que después del desarme y disolución de ETA, ahora debe ser el momento de los presos y presas.

EN EL CAMINO HACIA LA PAZ Y LA CONVIVENCIA. ORAIN PRESOAK¡¡, es la hoja de ruta que EUSKAL HERRIA, en toda su pluralidad, quiere y necesita. La misma que una vez más se les exigirá a los dos Estados el día 12 de enero. Tanto en Bilbao como en Baiona, diremos que el camino hacia la paz es tarea de todas las partes: de toda la sociedad, asociaciones, de las instituciones políticas y judiciales y por supuesto de los Estados.

Es tarea de todos los actores, pero si bien en la practica la llave la tienen los Estados, es la sociedad quien tiene en sus manos ayudar para cambiar la situación.

Es AHORA, cuando hay que dar pasos en favor de los presos y presas: es necesario cambiar el ritmo del proceso. Hemos llegado a la fase de urgencia. Ha llegado el momento de resolver el problema de los presos y presas¡¡. Se HA de eliminar el régimen de excepción al que se ven sujetos los presos y presas vascos, porque no es sino respetar los derechos fundamentales, porque, no solo asi lo exige la nueva situación política, sino porque es la base de una paz general e integral. Y mañana, necesitaremos un nuevo marco jurídico, acorde con el proceso de paz.

Los pasos, que hasta ahora se han dado unilateralmente, reclaman respuestas en positivo para alimentar la dinámica de paz. No darlos, puede frustrar las esperanzas de paz del conjunto de la sociedad y puede restar valor a los pasos que se han dado ya.Es imprescindible reafrmar lo hecho hasta ahora, confrmar que era necesario y bueno para la paz. Ese es el camino. Y por el debemos realizar el tránsito del pasado al futuro.

Debemos recorrer ese camino, sin dejar de lado ni olvidar nada del pasado. Les debemos la verdad, el respeto y reconocimiento, y reparación a todas las victimas de la violencia. Les debemos que el pasado no se repita, y trabajar para ello, sea cual sean las discrepancias entre las partes.

La convivencia democrática, imposible hace unos años, se ve posible en nuestro pueblo. Será un ejercicio colectivo a realizar por aquellos que hasta ahora no hemos sido capaces de unirnos¡¡

Con esa obligación, con esa esperanza, con esa frmeza, construiremos la paz que será buena para todos y todas. Cada día cuenta. La implicación de cada uno y cada una es necesaria.

En ese proceso hacia la convivencia, AHORA, debe ser la fase de los presos y presas¡¡

porque con la paz, todos y todas ganamos: construyamos la paz en la que todas las personas sean vencedoras.

Juntémonos y caminemos juntas por las calles de Bilbao y Baiona

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