“La movilización social es necesaria para terminar con la inhumana situación de lxs presxs enfermxs”

Hoy os hemos convocado para informar de la situación que vienen sufriendo las personas presas gravemente enfermas, y que con el fin de reclamar que la atención médica de estas personas sea atendida adecuadamente, hemos convocado para el 13 de mayo una cadena humana que pretende unir las avenidas de Villava y Marcelo Celayeta. Un recorrido de 3500 metros de solidaridad, 3500 metros de firme denuncia, 3.500 metros de empoderamiento por los derechos humanos y el fin de políticas de venganza.

La red ciudadana SARE viene prestando en los últimos años una atención especial a la situación que están sufriendo las personas presas gravemente enfermas. A pesar de que el número de personas encarceladas va disminuyendo, se incrementan los casos de aquellas que sufren graves dolencias. En la actualidad son 22 las presas y los presos con enfermedades graves e incurables, (cánceres y cuadros degenerativos). Tres de estas personas están ligados directamente a Nafarroa. En concreto se trata de:

• Iñaki Etxeberria Martin, que padece una Miopía Magna y varias enfermedades más en ambos ojos que le afectan gravemente a la vista con el grave riesgo de ceguera.
• Josetxo Arizkuren Ruiz,que padece una Cardiopatía Isquémica severa, por la que tiene que enfrentarse diariamente al riesgo de sufrir angina de pecho y/o infarto de miocardio.
• Gorka Fraile Iturralde, ha sido operado de un cáncer de lengua al que tiene que seguir haciendo frente.

Como SARE, nos reafirmamos en nuestro compromiso con los derechos humanos y la defensa de los derechos y libertades de las personas. Estos principios deben ser reconocidos como tales, independientemente de cualquier consideración, oportunidad, coyuntura o interés político. Las personas privadas de libertad son personas con derechos, y éstos así se les deben reconocer y cumplir en razón de la justicia.

En este sentido, la existencia de personas gravemente enfermas en prisión, cuya situación se ve agravada por largas condenas, deficiente asistencia sanitaria, y la política de dispersión penitenciaria, además de suponer una grave conculcación de derechos básicos de aquellas personas directamente afectadas, supone un castigo añadido a sus familiares y personas allegadas.

El caso del gazteiztarra Oier Gomez es el mejor ejemplo de lo que hoy estamos denunciando, nunca debió llevarse la situación de Oier hasta el límite, debiendo haber sido excarcelado mucho antes. Solo la movilización social ha conseguido acabar con la conculcación flagrante de sus derechos humanos. El caso de Oier muestra claramente cuál es el camino a seguir. Agradecer a toda la gente que ha trabajado por hacer cumplir el derecho a la salud de Oier, de manera que pueda ser debidamente atendido acompañado por los suyos.

Desde SARE queremos trasladar a la sociedad vasca la imperiosa necesidad de continuar movilizada. Son todavía muchos los presos/as con enfermedades graves que deberían ser puestos en libertad de inmediato. El Gobierno español debe poner fin ya a su política penitenciaria, basada en la venganza y en la deshumanización de las personas presas, política que está causando graves problemas a la salud y la vida de estas personas reclusas.

Al objeto de sensibilizar a la ciudadanía navarra de esta injusta situación y en exigencia de libertad para estas 22 personas gravemente enfermas, en especial para Iñaki, Josetxo y Gorka, la cadena humana del 13 de mayo, a la una del mediodía, unirá la Avenida de Villava (rotonda que une Villava, Burlada y el barrio de la Txantrea) con la Avenida Marcelo Celayeta (hasta Cuatro Vientos) finalizando con un acto en la Plaza Berria de Antsoain.

También queremos recordar que este próximo 6 de mayo a las 17.30, en Vitoria-Gasteiz se llevará a cabo una manifestación para reclamar la puesta en libertad de los presos y presas enfermas.